jueves, 25 de septiembre de 2008

Diferencias irreconciliables...

Tantas veces hemos escuchado o leído estas palabras juntas... algunos otros las han escrito en sus actas de divorcio; y me lleva a pensar las situaciones que incluyen semejante frase.

Por ejemplo, la religión, si es que los involucrados militan en iglesias distintas y no se pueden poner de acuerdo sobre cual camino elegirán para guíar a los hijos. Me pasó: yo no soy católica, bueno ni cristiana ni nada porque mis apacitos no llegaron a acuerdo alguno y nos dejaron a la buena de Dios, eso es bueno no? y entonces como mi especial esposo es católico desde antes que naciera, nos inclinamos hacia la derecha y las hijas han cumplido con los sacramentos que les marcan sus abuelos paternos, católicos también.
En la economía no hay diferencia alguna, el proveedor es él, así lo marca la ley no? ni discuto.
En lo social cada uno elige sus amistades y los círculos donde quiera girar, aunque no nos guste a veces refunfuñamos, hacemos agrios comentarios pero nos aguantamos.
En la política, ni fu ni fa, no hay pleito, regularmente nos identificamos con el mismo candidato.
PEEEEEEEEEERO, siempre hay un pero, hay una diferencia que no hemos podido salvar, y en la que influyen las regiones tan lejanas una de la otra en las que nacimos: LA GASTRONOMÍA.
No existe ni existirá acuerdo alguno sobre la comida, y la cena y el desayuno. Para el que tuvo la suerte de ser mi compañero de vida (jejejjejej) estar de acuerdo es que yo cocine lo que a él le gusta.
Diálogo permanente en este hogar agridulce hogar:
Esposo: Que me vas a dar de comer
Esposa: No te voy a dar nada, ime que quieres comer
Esposo: No sé lo que me vayas a dar
Esposa: Lo que quieras , tu dime que hago
Esposo: No sé, que vayas a hacer
Esposa: Hago lo que se les antoje
Esposo: No sé, lo que tu quieras
Esposa: Voy a hacer tinga (la tuya)
Esposo: Mmmmmm a mi no me gusta
Esposa: Entonces dime que quieres comer
Esposo: No sé que me vayas a dar
Esposa: Lo que tu quieras............... y así por los siglos de los siglos.
Tengo infinidad de testigos que pueden corroborar que éste diálogo es verdadero.
En mi amada Coahuila la mayoría de las comidas típicas son secas, carne, arroz, chile relleno, frijoles, tortitas, etc. en Texcoco todo va en caldillo, que acá le dicen guisado, de chile verde o de tomate regularmente, así que lo que a mi me gusta y acostumbro comer, no es lo que a él le gusta o acostumbra comer, así que los pleitos por las comidas, desayunos y cenas son inevitables.
La preparación y consumo de alimentos en ésta familia incluyen casi siempre diferencias irreconciliables.

martes, 16 de septiembre de 2008

No estamos para festejos!!

OOOOOOOOOOoooooooooodio los desfiles en Texcoco, y desfilar mucho más, así que no lo hago; pero hoy la jija menor tenía la consigna de hacerlo con su escuela y tuvimos que acompañarla, jamás diré quisimos.
No creo que en ninguna otra ciudad del País el desfile termine frente a la plaza principal, bueno pues aquí sí. El contingente pasa por el palacio municipal y de ahí hacia el jardín, que en otras ciudades sería la plaza o el zócalo, y justo en la esquina de dos de las calles mas importantes, terminan los mal organizados desfiles, las escuelas que terminan rompen filas se integran en las que todavía vienen desfilando, y a ese desorden se agregan los papás con varios hermanitos que siguen a sus hijos en toooooodo el desfile a un costado de ellos, y DENTRO DEL DESFILE!!!!
Los policias municipales son adornos solamente, pues aunque la mayoría de la gente se desplace entre las filas para tomar fotos, nadie les dice nada, por algo aseguro que es la ciudad donde no pasa nada.
He tenido oportunidad de observar algunos en otras ciudades, pero solo aquí en Texcoco no hay respeto hacia los que desfilan, ninguno. Puedes incluírte en el contingente que elijas y en un costado valiéndote progenitora, desfilas, así nomás, y será imposible que alguien te diga algo, después de todo ya es tradición.
Además hoy especialmente no tenía ningún deseo de continúar un festejo que para mi gusto debió suspenderse, por la tragedia en Morelia, no solamente allá era adecuado suspenderlo sino en todo México; sobre todo por las múltiples ejecuciones en diferentes regiones, por la ola de secuestros, por la inseguridad en las calles y demás situaciones que nos hacen preguntarnos: viva Mexico??????
Platicando hoy en la comida-cena con la familia completa (por aquello del puente), les dije: "si mañana mato a su papá y le corto la cabeza, lo tiro a media carretera, y me regreso a ver t.v. nadie va a investigar, jamás pensarán en otra hipótesis que no sea, estaba involucrado con el crimen organizado, ustedes creen que investigarían? noooooooooo" mi marido no acertó a decir ni pío (mujeres despechadas no lo tomen como opción, es un ejemplo). Así de mal están las cosas.
Será tan rápida la investigación para encontrar a los culpables de tan horrendo crimen como se ha estado haciendo en algunos casos de secuestros? Me choca ser negativa, pero lo dudo.
Siempre me pregunté como sería vivir en una zona de guerra, con atentados terroristas y gente mutilada por todos lados y preguntándote si será seguro salir, hoy lo sé, y se genera un sentimiento de impotencia.
No estamos para festejos.